Las fiestas de fin de año son la excusa perfecta para tener una escapada a la playa con su familia o amigos.
Sin embargo, un simple acto puede arruinar todos sus planes, pues meter el carro a la playa no solo atenta contra la seguridad de los demás, sino que le puede salir bien caro.
¿Qué consecuencias tiene meter el carro a la playa?
Meter el carro a la playa representa serios problemas legales y de seguridad, pues según la Ley de Tránsito esta práctica es sancionada con una multa de ¢62.000. Aunque parezca una cifra considerable, las consecuencias pueden ser aún más costosas si el carro queda atascado, es alcanzado por la marea o, peor aún, genera accidentes o lesiones a los bañistas.
¿Cuáles son las excepciones?
Hay unas pocas excepciones donde sí es posible ingresar el carro a la playa: En caso de emergencia, en operaciones para ingresar o sacar embarcaciones o para transporte de productos de pesca, cada uno de ellos con su debida autorización y permiso.
Impacto en el ambiente
Cuando mete el carro a la playa no solo arriesga la seguridad de los bañistas, sino que también afecta en gran medida al ecosistema de la playa. Pues, al compactar la arena, dificulta la nidificación de especies como tortugas y además, puede derramar fluidos o aceites que contaminen el área y altere la flora y la fauna de la zona
Pasela bien y no se la juegue
Evite convertir un día de playa en un problema mayor, pues las multas, los atascos o los daños a su carro no son un gran recuerdo de fin de año.
Sea prudente y estacione en lugares autorizados, recuerde que cuidar de las playas y su bolsillo empieza con decisiones responsables.
